sábado, 14 de enero de 2012

Tatuaje

Cuando su prometido regresó del mar, se casaron.En su viaje a las islas orientales, el marido había aprendido con esmero el arte del tatuaje. La noche misma de la boda, y ante el asombro de su amada, puso en práctica sus habilidades: armado de agujas, tinta china y colorantes vegetales dibujó en el vientre de la mujer un hermoso,enigmático y afilado puñal.
La felicidad de la pareja fue intensa y, como ocurre en esos casos, breve.En el cuerpo del hombre revivió alguna extraña enfermedad contraída en las islas pantanosas del este . Y una tarde, frente al mar, con la mirada perdida en la línea vaga del horizonte, el marino emprendió su ansiado viaje a la eternidad.[ ... ]
El dolor de la mujer fue intenso y, también, breve. El otro, hombre de tierra firme, comenzó a rondarla. Ella al principio esquiva y recatada, fue cediendo terreno. Concertaron una cita. La noche convenida ella lo aguardó desnuda en la penumbra del cuarto. Y en el fragor del combate, el amante, recio e impetuoso, se le quedó muerto encima, atravesado por el puñal.


Ednodio Quintero
Grandes minicuentos fantásticos, Alfaguara

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